Jesucristo/El hermano de Satanás

La evidencia de los cristianos antiguos

El padre cristiano ante-Nicea Lactantius escribió:

[Dios] produjo un Espíritu semejante a si mismo para ser investido con las perfecciones de Dios el Padre… Luego creó otro ser, en el cual la disposición del origen divino no continuó. Por tanto éste fue infectado por su propia envidia como por veneno. Pues él envidaba su predecesor, el cual por medio de su fidelidad es aceptable y amado de Dios el Padre. Este ser, el cual que de justo llegó a ser malo por su propia obra, él es al cual que los griegos llaman diabolus: nosotros lo llamamos acusador [hebreo: satanas], por que él nos denuncia ante Dios por los errores a que él mismo nos incita. Dios, por tanto, cuando empezó a crear la fábrica del mundo, puso sobre toda la obra aquel Hijo primero y mejor, y también lo empleó como consejero y constructor en el planear, ordenar, y hacer, puesto que Él es perfecto tanto en su conocimiento, y juicio, y poder…[1]

Mucho de lo que Lactantius enseñó aquí no se consideran «ortodoxo» por los cristianos modernos. Sin embargo, Lactantius sí era ortodoxo durante su vida. Asombradamente, muchas cosas que él enseñó aquí se corresponden exactamente con las doctrinas «no-ortodoxos» de la doctrina SUD. Por ejemplo,

  • «[Dios] produjo un Espíritu semejante a si mismo,» por nombre, Cristo. Cristo, en este sentido, no es “co-igual,” “siempre engendrado,” “del mismo substancia” “persona” de los credos extra-bíblicos.
  • «Luego creó otro ser, en el cual la disposición del origen divino no continuó.» Dios creó otro espíritu que se rebeló contra Dios y cayó de su estado exaltado. El es el diabolus.
  • Cristo es el “hijo primero y mejor” y no el único hijo.
  • Por fin, debido a que el diabolus y Cristo son hijos-espíritus de Dios, son hermanos espirituales.

La conclusión

Jesús, Satanás, y todos los humanos son hijos de Dios el Padre. Sin embargo, por medio la libertad de escoger, Jesús obedeció a Dios el Padre perfectamente y el participa en la naturaleza divina y el poder de su Padre. Por medio de esta libertad, Lucifer y los que le siguieron se rebelaron contra Dios, pelen contra Jesús y su reino e iglesia, y se han condenado eternamente. Los demás de los hijos de Dios—todos nosotros— tenemos que escoger o la vía de Jesús a que Él nos invita o a la de Satanás.

Al escoger el evangelio de Jesucristo y la gracia que proviene de el, podemos volver a vivir con Dios y maximizar la potencial divina que tenemos.


Endnotes

  1. [back] www.allaboutcults.org "What do Mormons believe - Doctrinal Differences," (7 November 2007).
  2. [back] Lactantius, Divine Institutes 2.9. in Alexander Roberts and James Donaldson, eds. The Ante-Nicene Fathers, 10 vols. (1885; reprint, Peabody: Hendrickson, 2004), 1:52–53.