Diferencia entre revisiones de «Pregunta: ¿El Mormonismo está en error porque el cristianismo requiere un "canon cerrado" en lugar del "canon abierto"?»

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Artículo traducido y redactado con permiso de FAIRLDS por: '''Andrew Miller''', '''Alberto Barrios,''' y '''Robert Cronk'''      
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Un autor (no SUD) cristiano comentó:
 
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:Es posible, sin embargo, deificar la Biblia al grado de darle un lugar tan central que la conciencia cristiana sensitiva pueda rebelarse. Podemos ilustrar tal grado de preponderancia en la Biblia por la utilización a menudo de (frases malinterpretadas) una declaración de Chillingworth: «La Biblia sola es la religión del protestantismo.»  O acaso no hemos oído cuantas veces ha sido dicho que la Biblia es la autoridad final de los cristianos. Si no parece tan evidente, me gustaría colocarla como la buena palabra de Dios.  Es Dios y no la Biblia quien es el factor central de los cristianos. Cuando nosotros hablamos de «La palabra de Dios» usamos la frase, la cual propiamente usada, puede ser aplicada a la Biblia, pero tiene un significado primario muy profundo. Es Dios quien le habla al hombre. Pero Él no lo hace solo através de la Biblia. Él habla através de profetas y apóstoles. Él habla mediante eventos específicos. Y mientras que su único mensaje a la iglesia se centra en los escritos registrados y expresados en la Biblia, esto nos hace recordar que Jesucristo es la Palabra («el Verbo») de Dios viviente, la manera personal en que se supera ya se ha dicho en este único libro. Aun la Biblia comprueba ser la palabra de Dios solo cuando el Espíritu Santo trabaje dentro de nosotros para afirmar la verdad y la autoridad divina de lo que dice las escrituras.  La fe cristiana no debe dar a las ayudas que Dios nos proviene la adoración y atención que le pertenecen solo a Dios y nuestro Señor Jesucristo. Nuestra esperanza es en Dios; nuestra vida es en Cristo; nuestro poder es en el Espíritu.  La  Biblia nos habla del Centro Divino de todo la vida y ayuda y poder, pero ella no es ese centro.  La enseñanza cristiana acerca del canon no se debe nunca deificar las escrituras [la Biblia].{{ref|floyd1}}
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:Es posible, sin embargo, deificar la Biblia al grado de darle un lugar tan central que la conciencia cristiana sensitiva pueda rebelarse. Podemos ilustrar tal grado de preponderancia en la Biblia por la utilización a menudo de (frases malinterpretadas) una declaración de Chillingworth: «La Biblia sola es la religión del protestantismo.»  O acaso no hemos oído cuantas veces ha sido dicho que la Biblia es la autoridad final de los cristianos. Si no parece tan evidente, me gustaría colocarla como la buena palabra de Dios.  Es Dios y no la Biblia quien es el factor central de los cristianos. Cuando nosotros hablamos de «La palabra de Dios» usamos la frase, la cual propiamente usada, puede ser aplicada a la Biblia, pero tiene un significado primario muy profundo. Es Dios quien le habla al hombre. Pero Él no lo hace solo através de la Biblia. Él habla através de profetas y apóstoles. Él habla mediante eventos específicos. Y mientras que su único mensaje a la iglesia se centra en los escritos registrados y expresados en la Biblia, esto nos hace recordar que Jesucristo es la Palabra («el Verbo») de Dios viviente, la manera personal en que se supera ya se ha dicho en este único libro. Aun la Biblia comprueba ser la palabra de Dios solo cuando el Espíritu Santo trabaje dentro de nosotros para afirmar la verdad y la autoridad divina de lo que dice las escrituras.  La fe cristiana no debe dar a las ayudas que Dios nos proviene la adoración y atención que le pertenecen solo a Dios y nuestro Señor Jesucristo. Nuestra esperanza es en Dios; nuestra vida es en Cristo; nuestro poder es en el Espíritu.  La  Biblia nos habla del Centro Divino de todo la vida y ayuda y poder, pero ella no es ese centro.  La enseñanza cristiana acerca del canon no se debe nunca deificar las escrituras [la Biblia]. <ref>Floyd V. Filson, ''Which Books Belong in the Bible?'' (Philadelphia: The Westminster Press, 1957), 20&ndash;21.</ref>
  
 
Decir que el canon está cerrado básicamente hace que la palabra escrita de Dios (la Biblia) reemplace a Dios mismo.  Unos llaman ese hecho la biblia-latría. Nuestros críticos mandan a Dios que no revele más mientras manden tener un canon cerrado, sin importar si Dios decidiera hablar más.
 
Decir que el canon está cerrado básicamente hace que la palabra escrita de Dios (la Biblia) reemplace a Dios mismo.  Unos llaman ese hecho la biblia-latría. Nuestros críticos mandan a Dios que no revele más mientras manden tener un canon cerrado, sin importar si Dios decidiera hablar más.
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Irónicamente, la doctrina de un canon cerrado no se encuentra en la Biblia.  Parece que tendría que haber una revelación extra-bíblica para poder saber que la Biblia está completa, si no fuera así, los hombres estarían haciendo decisiones sin autoridad en cuanto a lo que es el canon.  Entonces, ¡las personas que insisten que el canon esté cerrado tienen que tener una revelación extra-bíblica para poder eliminar la posibilidad de tener revelaciones extra-bíblicas!  Es de eso que el profeta José Smith escribió:
 
Irónicamente, la doctrina de un canon cerrado no se encuentra en la Biblia.  Parece que tendría que haber una revelación extra-bíblica para poder saber que la Biblia está completa, si no fuera así, los hombres estarían haciendo decisiones sin autoridad en cuanto a lo que es el canon.  Entonces, ¡las personas que insisten que el canon esté cerrado tienen que tener una revelación extra-bíblica para poder eliminar la posibilidad de tener revelaciones extra-bíblicas!  Es de eso que el profeta José Smith escribió:
  
:Lo que podemos hallar en las Escrituras con relación a las enseñanzas del cielo nos hace pensar que el hombre ha recibido, desde el principio, muchas instrucciones que ahora no poseemos.  Esto quizá no concordará con las opiniones de algunos de nuestros amigos que osadamente declaran que en la Biblia está escrito todo cuanto Dios ha hablado al hombre desde el principio del mundo, y que si acaso hubiera dicho más, ciertamente lo habríamos recibido.  Pero preguntamos, ¿acaso corresponde a una gente que jamás tuvo la fe suficiente para invocar un fragmento de revelación de los cielos—y cuanto hoy tienen lo deben a la fe de otro pueblo que vivió cientos y miles de años antes que ellos—sí, corresponde a tal gente decir cuánto es lo que Dios ha hablado y cuánto no?  Tenemos lo que tenemos, y la Biblia contiene lo que contiene; pero decir que Dios jamás comunicó al hombre más de lo que en ella está escrito, sería decir, desde luego, que por fin hemos recibido una revelación; porque se precisa una para llegar a tal conclusión, pues en ningún lugar de ese libro declara la voz de Dios que no volvería a hablar, después de comunicar lo que allí se encuentra; y si hombre alguno ha descubierto en realidad que la Biblia contiene todo lo que Dios jamás revelará al hombre, lo ha llegado a saber por una revelación directa, aparte de las que previamente escribieron los profetas y apóstoles. {{ref|edps1}}
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:Lo que podemos hallar en las Escrituras con relación a las enseñanzas del cielo nos hace pensar que el hombre ha recibido, desde el principio, muchas instrucciones que ahora no poseemos.  Esto quizá no concordará con las opiniones de algunos de nuestros amigos que osadamente declaran que en la Biblia está escrito todo cuanto Dios ha hablado al hombre desde el principio del mundo, y que si acaso hubiera dicho más, ciertamente lo habríamos recibido.  Pero preguntamos, ¿acaso corresponde a una gente que jamás tuvo la fe suficiente para invocar un fragmento de revelación de los cielos—y cuanto hoy tienen lo deben a la fe de otro pueblo que vivió cientos y miles de años antes que ellos—sí, corresponde a tal gente decir cuánto es lo que Dios ha hablado y cuánto no?  Tenemos lo que tenemos, y la Biblia contiene lo que contiene; pero decir que Dios jamás comunicó al hombre más de lo que en ella está escrito, sería decir, desde luego, que por fin hemos recibido una revelación; porque se precisa una para llegar a tal conclusión, pues en ningún lugar de ese libro declara la voz de Dios que no volvería a hablar, después de comunicar lo que allí se encuentra; y si hombre alguno ha descubierto en realidad que la Biblia contiene todo lo que Dios jamás revelará al hombre, lo ha llegado a saber por una revelación directa, aparte de las que previamente escribieron los profetas y apóstoles. <ref>José Smith, ''Enseñanzas del Profeta José Smith''. (Salt Lake City: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 1954), 66&ndash;67.</ref>
  
 
En otra ocasión escribió en cuanto a las preguntas frecuentes:
 
En otra ocasión escribió en cuanto a las preguntas frecuentes:
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: ¿Hay algo en ella que no nos autoriza a creerlo?  Si lo hay, hasta ahora no hemos podido hallarlo.
 
: ¿Hay algo en ella que no nos autoriza a creerlo?  Si lo hay, hasta ahora no hemos podido hallarlo.
 
:…«¿No está completo el canon de las Escrituras?»
 
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:Si lo está, el libro sufre de un gran defecto; de lo contrario lo habría dicho.{{ref|edps2}}
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:Si lo está, el libro sufre de un gran defecto; de lo contrario lo habría dicho. <ref>José Smith, ''Enseñanzas del Profeta José Smith''. (Salt Lake City: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 1954), 141.</ref>
  
 
Nunca durante toda la historia de la Biblia estaba el canon cerrado.  Mas bien, profetas fueron llamados continuamente por Dios y ellos muchas veces escribieron escrituras divinas.  Sería muy extraño que cambiara todo eso sin que Dios nos dijere que sus métodos estaban por cambiar. Dios no cambia (Hebreos 13:8).  
 
Nunca durante toda la historia de la Biblia estaba el canon cerrado.  Mas bien, profetas fueron llamados continuamente por Dios y ellos muchas veces escribieron escrituras divinas.  Sería muy extraño que cambiara todo eso sin que Dios nos dijere que sus métodos estaban por cambiar. Dios no cambia (Hebreos 13:8).  
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:Si el hombre permite que la razón lo guíe por el sendero del sentido común, se verá forzado a llegar a la conclusión de que no hay justificación posible para creer que todas las Escrituras están contenidas entre las cubiertas de la Santa Biblia. Tal doctrina cierra la boca del Altísimo y le quita el poder de hablar.  Ni se puede declarar, con un sentido razonable, que no hay más necesidad de revelación adicional. Es igualmente contradictorio decir que el Señor no tenía suficiente interés en ''otros pueblos'', fuera de Palestina, como para hablarles y guiarlos mediante su palabra.   
 
:Si el hombre permite que la razón lo guíe por el sendero del sentido común, se verá forzado a llegar a la conclusión de que no hay justificación posible para creer que todas las Escrituras están contenidas entre las cubiertas de la Santa Biblia. Tal doctrina cierra la boca del Altísimo y le quita el poder de hablar.  Ni se puede declarar, con un sentido razonable, que no hay más necesidad de revelación adicional. Es igualmente contradictorio decir que el Señor no tenía suficiente interés en ''otros pueblos'', fuera de Palestina, como para hablarles y guiarlos mediante su palabra.   
:Alma, un profeta nefita que vivió antes de los días de Cristo, expresó estas palabras: «Pues he aquí, el Señor les concede ''a todas las naciones'', que de su propia nación y lengua, enseñen su palabra, sí, con sabiduría, cuanto él juzgue conveniente que tengan; por lo tanto, vemos que el Señor aconseja en sabiduría, de conformidad con lo que es justo y verdadero» ([http://scriptures.lds.org/es/alma/29/8#8 Alma 29:8]). {{ref|JFS}}
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:Alma, un profeta nefita que vivió antes de los días de Cristo, expresó estas palabras: «Pues he aquí, el Señor les concede ''a todas las naciones'', que de su propia nación y lengua, enseñen su palabra, sí, con sabiduría, cuanto él juzgue conveniente que tengan; por lo tanto, vemos que el Señor aconseja en sabiduría, de conformidad con lo que es justo y verdadero» ([http://scriptures.lds.org/es/alma/29/8#8 Alma 29:8]). <ref>Joseph Fielding Smith, ''Selecciones de Doctrina de Salvacion''. (Salt Lake City: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 2001), 315.</ref>
  
 
===La revelación se necesita hoy en día tanto como en la antigüedad===
 
===La revelación se necesita hoy en día tanto como en la antigüedad===
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:Qué maravilloso es creer en la revelación moderna.  No puedo menos que pensar que si se necesitaba la revelación en la antigüedad, cuando la vida era sencilla, se necesita también en la actualidad, cuando la vida es compleja.  En la historia del mundo nunca ha habido una época en la que al hombre le hiciera más falta la revelación que ahora.
 
:Qué maravilloso es creer en la revelación moderna.  No puedo menos que pensar que si se necesitaba la revelación en la antigüedad, cuando la vida era sencilla, se necesita también en la actualidad, cuando la vida es compleja.  En la historia del mundo nunca ha habido una época en la que al hombre le hiciera más falta la revelación que ahora.
  
:Quiero testificarles, mis hermanos y hermanas, que el libro de revelaciones no se ha cerrado.  Dios dirige este día y esta hora y habla tan ciertamente hoy como lo hizo en los días de Abraham, Isaac, y Jacob. {{ref|Hinckley}}
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:Quiero testificarles, mis hermanos y hermanas, que el libro de revelaciones no se ha cerrado.  Dios dirige este día y esta hora y habla tan ciertamente hoy como lo hizo en los días de Abraham, Isaac, y Jacob. <ref>Gordon B. Hinckley, ''Discursos del Presidente Gordon B. Hinckley, Volumen 2''. (Salt Lake City: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 2005), 512.</ref>
  
 
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Revisión del 07:56 14 jun 2014

Tabla de Contenidos

Canon abierto vs. canon cerrado

Traducido por Andrew Miller y Alberto Barrios y Robert Cronk.

Plantilla:Designación pregunta

Se afirma que la Iglesia está en el error porque el cristianismo requiere un 'canon cerrado' (o sea, no hay más revelación autorizado) mientras que la Iglesia de Jesucristo de SUD tiene un 'canon abierto' con la posibilidad de recibir más revelaciones.

Plantilla:Designación conclusión

Las doctrinas que no hay más revelación y que el canon de escrituras está cerrado no se encuentran en la Biblia. ¡Insistir en eso es crear una doctrina no-bíblica e insistir que Dios sea obligado por ella! Tales doctrinas se requerirían la revelación misma que niegan ser autorizada. Aun la interpretación correcta de las enseñanzas bíblicas requiere revelación autorizada, la cual sería extra-bíblica. Sin la revelación la interpretación de las escrituras depende del intelecto humano, lo cual es extra-bíblico. Entonces, tenemos que eligir: ¿Confiaré más en Dios o en mi propio entendimiento?

Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dice Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos(Isaías 55:8-9).

Los críticos están libres de aferrarse a estas doctrinas si desean, pero no deben criticar a los Santos de los Últimos Días por creer en doctrinas extra-bíblicas relevadas de Dios cuando los críticos mismos insisten en un canon cerrado lo cual es una doctrina extra-bíblica sin autoridad divina.

Plantilla:Designación respuesta

Dios es superior a su palabra escrita

La biblia es un registro importante que contiene algunos de los mensajes que Dios dio al mundo en tiempos antiguos. Sin embargo, la Biblia—tanto como todos de los textos escritos—no debe ser el enfoque central de la vida y la fe del cristiano. Hay Uno solo que merece eso: el Dios todopoderoso.

Un autor (no SUD) cristiano comentó:

Es posible, sin embargo, deificar la Biblia al grado de darle un lugar tan central que la conciencia cristiana sensitiva pueda rebelarse. Podemos ilustrar tal grado de preponderancia en la Biblia por la utilización a menudo de (frases malinterpretadas) una declaración de Chillingworth: «La Biblia sola es la religión del protestantismo.» O acaso no hemos oído cuantas veces ha sido dicho que la Biblia es la autoridad final de los cristianos. Si no parece tan evidente, me gustaría colocarla como la buena palabra de Dios. Es Dios y no la Biblia quien es el factor central de los cristianos. Cuando nosotros hablamos de «La palabra de Dios» usamos la frase, la cual propiamente usada, puede ser aplicada a la Biblia, pero tiene un significado primario muy profundo. Es Dios quien le habla al hombre. Pero Él no lo hace solo através de la Biblia. Él habla através de profetas y apóstoles. Él habla mediante eventos específicos. Y mientras que su único mensaje a la iglesia se centra en los escritos registrados y expresados en la Biblia, esto nos hace recordar que Jesucristo es la Palabra («el Verbo») de Dios viviente, la manera personal en que se supera ya se ha dicho en este único libro. Aun la Biblia comprueba ser la palabra de Dios solo cuando el Espíritu Santo trabaje dentro de nosotros para afirmar la verdad y la autoridad divina de lo que dice las escrituras. La fe cristiana no debe dar a las ayudas que Dios nos proviene la adoración y atención que le pertenecen solo a Dios y nuestro Señor Jesucristo. Nuestra esperanza es en Dios; nuestra vida es en Cristo; nuestro poder es en el Espíritu. La Biblia nos habla del Centro Divino de todo la vida y ayuda y poder, pero ella no es ese centro. La enseñanza cristiana acerca del canon no se debe nunca deificar las escrituras [la Biblia]. [1]

Decir que el canon está cerrado básicamente hace que la palabra escrita de Dios (la Biblia) reemplace a Dios mismo. Unos llaman ese hecho la biblia-latría. Nuestros críticos mandan a Dios que no revele más mientras manden tener un canon cerrado, sin importar si Dios decidiera hablar más.

El canon cerrado no es una doctrina bíblica

La doctrina de un canon cerrado no es una doctrina bíblica. La Biblia da testimonio que Dios llamó profetas y apóstoles en tiempos anteriores. ¿Por qué no podría—o mejor dicho—por qué no continuarías de hacerlo?

Irónicamente, la doctrina de un canon cerrado no se encuentra en la Biblia. Parece que tendría que haber una revelación extra-bíblica para poder saber que la Biblia está completa, si no fuera así, los hombres estarían haciendo decisiones sin autoridad en cuanto a lo que es el canon. Entonces, ¡las personas que insisten que el canon esté cerrado tienen que tener una revelación extra-bíblica para poder eliminar la posibilidad de tener revelaciones extra-bíblicas! Es de eso que el profeta José Smith escribió:

Lo que podemos hallar en las Escrituras con relación a las enseñanzas del cielo nos hace pensar que el hombre ha recibido, desde el principio, muchas instrucciones que ahora no poseemos. Esto quizá no concordará con las opiniones de algunos de nuestros amigos que osadamente declaran que en la Biblia está escrito todo cuanto Dios ha hablado al hombre desde el principio del mundo, y que si acaso hubiera dicho más, ciertamente lo habríamos recibido. Pero preguntamos, ¿acaso corresponde a una gente que jamás tuvo la fe suficiente para invocar un fragmento de revelación de los cielos—y cuanto hoy tienen lo deben a la fe de otro pueblo que vivió cientos y miles de años antes que ellos—sí, corresponde a tal gente decir cuánto es lo que Dios ha hablado y cuánto no? Tenemos lo que tenemos, y la Biblia contiene lo que contiene; pero decir que Dios jamás comunicó al hombre más de lo que en ella está escrito, sería decir, desde luego, que por fin hemos recibido una revelación; porque se precisa una para llegar a tal conclusión, pues en ningún lugar de ese libro declara la voz de Dios que no volvería a hablar, después de comunicar lo que allí se encuentra; y si hombre alguno ha descubierto en realidad que la Biblia contiene todo lo que Dios jamás revelará al hombre, lo ha llegado a saber por una revelación directa, aparte de las que previamente escribieron los profetas y apóstoles. [2]

En otra ocasión escribió en cuanto a las preguntas frecuentes:

«¿Hay algo en la Biblia que les da licencia para creer que hay revelación en estos días?»
¿Hay algo en ella que no nos autoriza a creerlo? Si lo hay, hasta ahora no hemos podido hallarlo.
…«¿No está completo el canon de las Escrituras?»
Si lo está, el libro sufre de un gran defecto; de lo contrario lo habría dicho. [3]

Nunca durante toda la historia de la Biblia estaba el canon cerrado. Mas bien, profetas fueron llamados continuamente por Dios y ellos muchas veces escribieron escrituras divinas. Sería muy extraño que cambiara todo eso sin que Dios nos dijere que sus métodos estaban por cambiar. Dios no cambia (Hebreos 13:8).

La interpretación de las escrituras se requiere la revelación

Aun que si la Biblia de verdad contuviere todas las enseñanzas necesarias, es claro através de la historia cristiana que la Biblia puede ser interpretada de muchas maneras distintas por lectores sinceros y honestos. ¿Qué más, menos la revelación continua, podría darnos una interpretación y aplicación correctas de ella? ¿Quiere Dios que confiamos solo en nuestro propio intelecto e inteligencia? ¿No llegaría a ser así nuestra inteligencia e intelecto una fuente extra-bíblica para la información divina? ¿No sería mejor confiarle en Dios que en nosotros mismos?

Dios habla en todos los tiempos a todas las naciones

Escribió el Presidente Joseph Fielding Smith:

Si el hombre permite que la razón lo guíe por el sendero del sentido común, se verá forzado a llegar a la conclusión de que no hay justificación posible para creer que todas las Escrituras están contenidas entre las cubiertas de la Santa Biblia. Tal doctrina cierra la boca del Altísimo y le quita el poder de hablar. Ni se puede declarar, con un sentido razonable, que no hay más necesidad de revelación adicional. Es igualmente contradictorio decir que el Señor no tenía suficiente interés en otros pueblos, fuera de Palestina, como para hablarles y guiarlos mediante su palabra.
Alma, un profeta nefita que vivió antes de los días de Cristo, expresó estas palabras: «Pues he aquí, el Señor les concede a todas las naciones, que de su propia nación y lengua, enseñen su palabra, sí, con sabiduría, cuanto él juzgue conveniente que tengan; por lo tanto, vemos que el Señor aconseja en sabiduría, de conformidad con lo que es justo y verdadero» (Alma 29:8). [4]

La revelación se necesita hoy en día tanto como en la antigüedad

Dijo el Presidente Hinckley (1910-2008):

Qué maravilloso es creer en la revelación moderna. No puedo menos que pensar que si se necesitaba la revelación en la antigüedad, cuando la vida era sencilla, se necesita también en la actualidad, cuando la vida es compleja. En la historia del mundo nunca ha habido una época en la que al hombre le hiciera más falta la revelación que ahora.
Quiero testificarles, mis hermanos y hermanas, que el libro de revelaciones no se ha cerrado. Dios dirige este día y esta hora y habla tan ciertamente hoy como lo hizo en los días de Abraham, Isaac, y Jacob. [5]

Notas


  1. Floyd V. Filson, Which Books Belong in the Bible? (Philadelphia: The Westminster Press, 1957), 20–21.
  2. José Smith, Enseñanzas del Profeta José Smith. (Salt Lake City: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 1954), 66–67.
  3. José Smith, Enseñanzas del Profeta José Smith. (Salt Lake City: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 1954), 141.
  4. Joseph Fielding Smith, Selecciones de Doctrina de Salvacion. (Salt Lake City: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 2001), 315.
  5. Gordon B. Hinckley, Discursos del Presidente Gordon B. Hinckley, Volumen 2. (Salt Lake City: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 2005), 512.

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